El mobbing es el nombre con el que se conoce al acoso laboral. También se utilizan con frecuencia términos como mobbing laboral y bullying laboral. Se trata de una situación que se produce en el lugar de trabajo y consiste en acosar al trabajador de forma continua y reiterada, con la intención de atentar contra su integridad.
El acoso laboral se puede producir de muchas formas: amenazas, violencia psicológica, agresiones verbales, burlas, acorralamiento, eliminación de funciones, etc. Estas actuaciones pueden provocar en el trabajador acosado problemas psicológicos, hasta el punto de llegar a considerarse culpable de lo ocurrido. Se trata de hechos que pueden constituir un delito, regulado en el artículo 173 del Código Penal.
¿Qué personas pueden realizar el acoso laboral?
El acoso laboral o mobbing se puede realizar:
- Por otros trabajadores, compañeros o subordinados, con la intención de que el trabajador deje el trabajo y ocupar su puesto.
- Por el empresario o jefe, para que el trabajador abandone voluntariamente su trabajo y no tenga que ser despedido.
3 Requisitos para que exista acoso laboral
Para que se produzca una situación de mobbing o acoso laboral, es preciso:
- Que el acoso laboral sea sistemático y prolongado. Es decir, que la actuación del acosador sea continua y reiterada, no basta con un hecho aislado.
- Que la actuación del acosador sea hostil. Es decir, que el acosador realice actos que atemorizan al trabajador (gritos, enfados, ridiculizar al trabajador, desprecio…).
- Que la finalidad sea poner en peligro o perjudicar la integridad del trabajador.
¿Cómo denunciar el acoso laboral?
Comunicar a la empresa la situación
Deberás comunicar por escrito la situación de acoso laboral que estás sufriendo con el fin de que quede constancia.
No olvides acompañar una copia para que sea firmada por la empresa.
- Recopilar pruebas
Antes de decidirse a denunciar la situación de acoso laboral es importante recabar pruebas para acreditar la situación. A continuación, te exponemos algunas formas de recopilar pruebas:
- Guardar mensajes (correos electrónicos, whatsapps, sms) que te envíe el acosador y que puedan constituir una prueba del acoso que estás sufriendo.
- Declaración de testigos. El testimonio de tus compañeros de trabajo puede ser muy útil si decides entablar un proceso judicial.
- Grabar llamadas recibidas del acosador.
- Informes médicos que acrediten que estás atravesando una situación de ansiedad o trastornos físicos derivados del acoso laboral. Una pericia psicológica puede ser una de las pruebas fundamentales.
Las situaciones de acoso laboral son frecuentes y su denuncia es un procedimiento que puede resultar complejo, sobre todo a la hora de escoger los pasos adecuados y de probar la existencia de las conductas constitutivas de mobbing laboral.
Por ello es recomendable contar con el asesoramiento de un abogado especialista en derecho laboral, que cuente con experiencia en reclamaciones por acoso laboral y sea experto en la materia.